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Diasen

desde el 1978

Las raíces profundas del futuro

Diasen es fundada en el año 2000 a partir de una idea de Floriano Mingarelli, un empresario capaz de combinar experiencia y visión en una trayectoria que ha hecho cambiar de piel a una pequeña empresa innovadora y que se ha convertido en líder de las soluciones ‘green’ para la construcción.

En la actualidad, la empresa está dirigida por Diego Mingarelli, hijo del fundador, que con gran visión de futuro ha impulsado el estudio de los materiales y la experimentación de soluciones de vanguardia en la dirección de una sostenibilidad ambiental que para Diasen se ha convertido en rasgo distintivo, identidad compartida y elemento de caracterización en el mercado.

La sede y la planta de fabricación están situadas en Sassoferrato, un municipio del interior de la región de Las Marcas, en la provincia de Ancona, cerca de un importante polo italiano de manufactura y cultura productiva.

Una zona repleta de historia, de cohesión social y de bellezas naturales que se reflejan en un paisaje dulce, modificado con respeto y dedicación por la mano del hombre en su continua búsqueda de una ordenación vivible y sostenible.

Encontrarás más en el bosque que en los libros.
Los árboles y las piedras te enseñarán lo que nunca aprenderás de un maestro.

(San Bernardo de Claraval)

La vocación empresarial de Diasen, y su impulso de crecimiento, se fundan en este terreno estable, en una idea de comunidad que sabe interpretar y vivir el cambio sin extraviar ese sentimiento compartido que hace posible que el futuro tenga raíces sólidas y profundas.

La marca Diasen es un acrónimo atinado que surge de la fusión de Diathonite –la línea de productos a base de corcho más característica y reconocible– y Sentinum, nombre latino de la antigua ciudad, escenario de una batalla decisiva para el dominio de Roma en el centro de Italia.

El arraigo en el territorio de origen, resiliente y franciscano, es un rasgo esencial de la filosofía de la empresa, una fuente de inspiración necesaria para alcanzar niveles de excelencia en el producto y en la valorización del capital humano que explican el éxito actual y los desafíos futuros.

Las raíces dan savia a la proyección internacional de Diasen y le permiten ser totalmente ‘verde’ porque la sostenibilidad se aprende a partir de las cosas más cercanas, de los equilibrios y las relaciones que uno es capaz de construir y mantener.